En primer lugar, porque confunden [los dirigentes europeos], o engañan, cuando hablan sobre el origen de la inseguridad y la naturaleza de las amenazas. Los dirigentes europeos no hacen un balance autocrítico de lo que ha ocurrido en los últimos años. Se empeñan en culpar a Rusia de la situación actual, cuando la propia UE y EEUU han contribuido a provocarla, incumpliendo sus compromisos de no expansión de la OTAN y generando una verdadera e innecesaria amenaza existencial para Rusia. Producirían risa, si no fuesen por lo dramático de la situación en la que estamos, las declaraciones de Macron advirtiendo de que Putin se propone invadir a toda Europa (cuando no han parado de decir que Rusia que su derrota militar ante Ucrania no sólo era posible, sino segura; incluso diciendo que había tenido que sustituir los carros de combate por burros).
No voy a negar que Europa se enfrenta a amenazas exteriores, pero no son todas las que nos ponen en peligro. La política insensata, belicista, antieuropea, seguidista frente a EEUU, provocadora y pirómana que han seguido sus dirigentes también ha creado enemigos y se ha convertido en un riesgo para la propia UE.
[…] La UE debe ser realista, pragmática e inteligente. Debería darse cuenta de lo que realmente está ocurriendo en el mundo: el ocaso del imperio estadounidense que sustituyó al británico. Por eso, el haberse dejado caer ciegamente en brazos de los EEUU de Biden (y antes de otros presidentes, aunque ahora en medio de una guerra) ha sido un gravísimo error histórico. Donald Trump no es un loco, ni un pollo sin cabeza, como ingenuamente se quiere hacer creer. Lidera, con mucha más decisión, aunque de forma más desvergonzada, inhumana e ilegal, eso sí, la misma estrategia que Biden: lograr retrasar lo más posible ese colapso creando condiciones que favorezcan la reindustrialización de su economía, incentiven la vuelta de miles de empresas actualmente deslocalizadas y permitan que el dólar siga siendo la moneda de referencia mundial. Cuanto más desconcierto genere, mayor sea la incertidumbre y más debilite al resto de las economías, más fácilmente podría lograr su objetivo.
Juan Torres López (marzo de 2025)
La guerra en Palestina no ha terminado como sabemos (víctimas diarias en Gaza, en el Líbano y, especialmente, el Cisjordania) Un artículo de Thomas Fazi del pasado 11 de marzo habla de todo ello: “De Gaza a Siria: la guerra permanente de Israel” (https://www.thomasfazi.com/p/). Abre con estas palabras:
“Israel tiene un nuevo jefe militar, el general Eyal Zamir. Dirigiéndose a él en su ceremonia de investidura, el primer ministro Benjamin Netanyahu declaró que el Estado judío está «decidido» a lograr la victoria en su «guerra en múltiples frentes» que comenzó el 7 de octubre de 2023.
Zamir, que ha declarado que 2025 será «un año de combate», está planeando una operación terrestre a gran escala para «aumentar la presión» sobre Hamás. «Hamás ha sufrido un duro golpe, pero aún no ha sido derrotado. La misión aún no ha terminado», dijo el general.
También asumirá el mando de la ofensiva en curso en Cisjordania, donde el ejército israelí ha atacado ciudades y campos de refugiados, y por primera vez en veinte años también ha desplegado tanques.
Aunque se ha retirado de la mayor parte del sur del Líbano, Israel ha mantenido el control de cinco puestos militares en territorio libanés y continúa llevando a cabo ataques aéreos en el país vecino.
Tel Aviv también está extendiendo su campaña militar a Siria, donde ha construido puestos avanzados adicionales en los Altos del Golán ocupados tras la caída del presidente sirio Bashar al-Assad, mientras que su fuerza aérea continúa atacando objetivos en varias partes del país, incluida la zona portuaria de Tartus.
Mientras tanto, los aviones F-15 y F-35 israelíes han llevado a cabo ejercicios conjuntos con un bombardero estadounidense B-52 y cazas británicos, un mensaje probablemente dirigido a Irán…”
No olvidemos Gaza, no olvidemos Cisjordania, no olvidemos Palestina. No permitamos que la destrucción y el colonialismo asolen Cisjordania. ¡Palestina en el corazón! Sigamos apoyando todas las iniciativas de apoyo y protesta que vayan surgiendo.
(Según la revista médica Lancet, en los primeros 12 meses del conflicto, la esperanza de vida de Gaza se desplomó de 75,5 años a solo 40,5, la más baja del mundo: 18 años menos que en Somalia, 14 menos que en Nigeria).
Me centro en un tema que a todos nos concierne. Dos previas:
1. Pobreza en ..Cat [De un artículo de Sergi Reventós [1]] Tras la publicación por el INE (Instituto Nacional de Estadística) de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) de 2024, UNICEF España subraya de nuevo que los niños/as siguen siendo los grandes perdedores. Algunos de los datos que facilitan:
a) La tasa de pobreza de ingreso para la infancia se ha incrementado del 28,9 al 29,2% mientras desciende un poco (hasta el 19,7%) para el resto de población, ampliando la brecha de pobreza infantil, que ha pasado en los últimos 5 años de algo más de 6 puntos porcentuales a casi 10.
b) Mientras que España reduce la pobreza infantil mediante transferencias (ayudas) en un 17%, la media de los países de la UE lo hace en un 41% (algunos países europeos están cerca o superan el 60%).
c) La pobreza y la exclusión social de la infancia en España ha sido valorada por la Comisión Europea como “en situación crítica” dentro del conjunto de las políticas sociales. Somos, junto a Bulgaria, el único país junto que recibe este calificativo.
d) El riesgo de pobreza y exclusión social, especialmente en edades muy tempranas, se relaciona con más problemas de salud mental en la infancia y la adolescencia (ansiedad, depresión, problemas somáticos). Los niños/as que viven en un estrés continuado ven afectado su desarrollo cerebral, condicionando su salud presente y futura.
2. “Empadronar al pobre” es un artículo crítico y bien informado de Frances Valls que será de su interés [2]. Una de sus consideraciones: “Con los años, la doctrina ha creado escuela y no solo en el xenófobo gobierno municipal de Ripoll [Aliança Catalana], pues, aunque la ley obliga a empadronar a todo aquel ciudadano que viva en el municipio, los ayuntamientos hacen de su capa un sayo y cada uno aplica la legislación a su manera. Ahí está el consistorio de Martorell [Junts] en los tribunales por negarse a empadronar no solo a residentes en casas ocupadas de grandes tenedores, sino también a personas sin techo o que viven realquilados…” El panorama, observa Valls razonablemente alarmado, “se antoja incierto pensando en una futura Generalitat de Junts o en un gobierno central del PP con Vox a bordo. Por el momento, es una tarea de primer orden que las fuerzas políticas democráticas no se contagien de ese virus que se extiende por la sociedad catalana y también por la española: el miedo electoralmente rentable al inmigrante pobre.”
Hablemos del rearme y de los proyectos militaristas de la UE.
Unos datos para situarnos: en 2024, el gasto militar de los 27 países de la UE alcanzó los 326.000 millones de euros (casi cuatro veces el gasto militar de Rusia, el 2ª presupuesto militar del mundo tras USA; 80.000 millones más que el presupuesto chino para 2025: 245.000 millones, 3,5 veces más gasto militar per capita que China). Por lo demás, ese elevado presupuesto militar conjunto ha aumentado un 30% en los últimos tres años.
En cuanto a España, el presupuesto del Ministerio de Defensa ascendió a 12.800 millones en 2023, pero la Intervención General del Estado contabilizó 15.250 millones al cierre del ejercicio El SIPRI, por su parte, estima que el presupuesto real (incluyendo partidas presupuestarias de otros ministerios y organismos relacionados) fue de 27.600 millones (si se suma la deuda imputable al gasto militar ascendería a 48.800 millones; con la última cifra sería más del 3% del PIB español).
De hecho, tomando datos oficiales, el aumento del gasto militar en España ha sido de 8.483 millones de euros en estos cuatro últimos años: ¡un incremento del 75,5%! ¡Y bajo gobiernos de coalición de izquierdas!
No es verdad como dicen los dirigentes europeos, ha señalado Juan Torres López con toda razón, que nuestra única alternativa sea “involucrarnos cada día más en la política de amenazas, dejarnos llevar por el cántico de los belicistas, aumentar el gasto militar y prepararnos para la guerra”.
No, no es esa única alternativa. De hecho, no es una verdadera alternativa. Es seguir la vieja y belicista historia de siempre: si quieres la paz, dicen, gritan, ordenan, prepárate para la guerra. Pero no es eso, nunca fue eso: si queremos la paz (y es eso lo que queremos, paz, justicia e igualibertad), preparemos la paz con todas sus aristas.
Dejemos nuestras diferencias menores. Olvidémonos de asuntos laterales que nos separen. Creemos un amplio frente de lucha ciudadana-popular por la paz. Como en la lucha antiotánica de los años ochenta, como hicimos contra la guerra de Irak a principios de siglo. Concentremos nuestra atención y finalidades en lo más importante: la lucha contra el rearme de la UE, la lucha contra la militarización, la lucha contra el despropósito que están anunciando los enloquecidos y belicistas dirigentes europeos. Es urgente la paz en Ucrania (también en Palestina, en Sudán y en todos los enfrentamientos de destrucción y muerte del mundo).
No tiene sentido alguno alienarnos y alinearnos a las órdenes del sector militarista de la UE (claramente dependiente de la industria militar usamericana). No tiene ningún sentido para los pueblos europeos seguir alimentando crecientemente la industria militar europea (y, sobre todo, la usamericana) con beneficios crecientes e impúdicos. El rearme es siempre camino de destrucción y enfrentamiento entre pueblos… y de pingües beneficios para los poderosos y descreadores de la Tierra.
De hecho, la UE, por sí misma, no está en condiciones de rearmarse. Rearmarse significa, como ha señalado José Luis Martín Ramos, comprar armas e implementos de defensa a USA. ¡Menuda forma de construir una defensa europea autónoma!
(Por cierto, es una vergüenza para todos que España sea el noveno país exportador de armas del mundo. La empresa militar española Indra alcanzó en 2024 un beneficio neto de 278 millones de euros, con un incremento cercano al 35% respecto a 2023).
Cualquier plan razonable de existencia, de vida, pasa porque Europa (y Rusia es también Europa) sea un continente de paz, no de guerra; un continente de justicia, no de opresión; un continente de hermandad, no de enfrentamientos fraticidas.
La paz a la que aspiremos, ha observado también Juan Torres López, “no puede ser la de los cementerios ni podemos creer que será completa. La paz siempre es imperfecta y seguramente limitada, el resultado de acuerdos frágiles, difíciles y casi siempre en la cuerda floja. Por ello, lo mejor que hay que hacer para alcanzarla y asegurarla es sostener los principios que la rijan sobre una base de respeto mutuo, bienestar y progreso de los pueblos.”
En esa lucha estamos, esos son nuestros valores y objetivos. ¡En pie de resistencia, en pie de paz!
Les copio al final un llamamiento a favor de la paz y el desarme que probablemente será de su interés. Fírmenlo si les parece razonable; yo lo he hecho.
(Aunque eran otras las circunstancias, este año que seguimos recordando, en el primer centenario de su nacimiento, la obra y praxis de Manuel Sacristán tal vez sea un buen momento para leer o releer sus escritos pacifistas y antimilitaristas. Una buena parte de ellos está incluidos en M. Sacristán, Pacifismo, ecologismo y política alternativa. Se editó por vez primera en 1987; Icaria y Público hicieron una reedición en 2009. No se encuentra en librerías, pero sí en bibliotecas).
Añado una selección de comentarios y reflexiones de diversos autores sobre la situación y sus proximidades que tal vez sea de su interés (les evito los enlaces para no cargar la página). Antes una votación significativa: «La Asamblea francesa ha votado una moción de Macron de apoyo a Ucrania y embargo de activos rusos. Socialistas y verdes han votado a favor. Rassemblement National se ha abstenido. En contra: Francia Insoumise y PCF.»
1. Rafael Poch de Feliu: “La elite política europea se caracteriza por su ineptitud. En casi su totalidad se trata de gente que durante décadas externalizó a Estados Unidos la función de pensar políticamente, adoptando el infantilismo político, el narcisismo y la arrogancia de unos “principios y valores” que, desde luego, la UE no encarna, practicando una política basada en la imagen, y creyéndose su propia propaganda mediática sobre el motivo y origen del conflicto de Ucrania, a saber: el deseo de un malvado dictador de ampliar su imperio y recrear una especie de URSS… Respecto a la invocada “invasión rusa de Europa” es una fantasía. Choca con la propia realidad del lento y penoso avance militar ruso en Ucrania y con la propia narrativa europea. Durante años, la UE ha mantenido que la inclusión de Ucrania en la OTAN es la garantía de seguridad, porque Rusia no se atrevería a atacar a la OTAN, pero al mismo tiempo se afirma esa posibilidad al agitar el “que vienen los rusos”.
2. Andrea Zhok: “La cuestión de fondo es simple, querido Scurati, queridos lectores de Repubblica, querida Von der Leyen: durante décadas han destruido sistemáticamente todo sentido de pertenencia, histórico, cultural, territorial, porque no era lo suficientemente moderno y globalizado; han desmantelado toda identificación con el destino colectivo y toda solidaridad, porque lo primero es la competencia; han cultivado obstinadamente el peor individualismo autorreferencial, porque esta es la libertad de mercado; han destrozado familias, comunidades, lealtades personales, porque eran «conservadoras y retrógradas»; han destruido cualquier valor sustituyéndolo por un precio; y ahora, después de sembrar el nihilismo durante dos generaciones, ¿Se quejan de que no encuentran mano de obra dispuesta a morir por su híbrido y por el aparcamiento en la zona de tráfico limitado? Este es el casco, esta es la bayoneta del abuelo, por favor, después de ustedes.”
3. Federico Aguilera Klink: “El verdadero objetivo del rearme no es hacer frente a ninguna amenaza rusa. Lo mismo que en la Guerra Fría, el rearme es un fin en sí mismo. Europa quiere abrir una nueva línea de negocio que hasta ahora estaba monopolizada por terceros y el dispendio lo tiene que justificar blandiendo a todas horas la “amenaza rusa”.
En el momento de reducir los salarios y recortar los derechos sociales, el chivo expiatorio será el mismo: la culpa es de Putin.”
4. Jordi Calvo, investigador del Centre Delàs d’Estudis per la Pau: ¿Es un mito considerar, como en ocasiones se plantea, que la denominada seguridad europea depende de la tutela y el paraguas militar de Estados Unidos? JC: Es una falsedad, que se puede comprobar con cifras; el gasto militar de Estados Unidos fue, en 2023, de 916.000 millones de dólares; el de Europa Central y Occidental sumó 407.000 millones de dólares, un 10% superior al del año anterior; ya en tercer lugar estaba China (cerca de 296.000 millones de dólares) y a mucha distancia Rusia. Además, según el ranking de Global Firepower en 2025, Francia, Reino Unido e Italia se sitúan entre los 10 países del mundo con mayor fuerza militar disponible.
5. Pepe Escobar: “Para agravar el escenario kafkiano, el primer ministro de Dinamarca, que está a punto de perder Groenlandia «de una forma u otra» frente a Trump 2.0, inmortalizó las palabras: «la paz en Ucrania será más peligrosa que la guerra». El primer ministro polaco no perdió el ritmo y añadió que «Europa es más fuerte que Rusia y capaz de ganar en cualquier confrontación militar, financiera o económica». Europa está en una racha tan «ganadora» ahora, como muestra el historial. Toda esta desconcertante Torre de Babel demuestra, sin lugar a dudas, que Europa está geopolítica y geoeconómicamente muerta y enterrada. Ningún dios teutónico, con una gorda cantando, podrá resucitarla.”
6. Juan Torres López: “La UE puede ser, por el contrario, un bastión de sensatez y de luz en los tiempos de oscuridad en los que vivimos si asumiera otros principios fundamentales, quizá como los siguientes:
– La tregua y el fin de la guerra es el objetivo primordial cuando ya se ha desatado. La UE debe apoyar el camino que lleve a conseguirlos, vengan de donde vengan y lo antes posible.
– La paz sólo puede basarse en la ausencia de amenazas. Europa tendría que asumir sus errores pasados, entender que los acuerdos deben respetarse y que no se puede acosar a ningún país. La mejor contribución que la UE puede hacer ahora a la paz es reconocer que contribuyó a quebrarla, tal y como hoy día es sabido a través de multitud de testimonios de líderes políticos o diplomáticos.
– Hay que poner sobre la mesa nuevos acuerdos de desmilitarización permanente. Europa debería liderar la apuesta por suscribir los que impulsen la desmilitarización y pongan freno al incremento salvaje del gasto militar. Empezando por la necesaria reconsideración del papel de la OTAN que ha actuado como detonante y aceleradora de conflictos más que como instrumento de la paz….” [3].
7. Eduardo Luque: “Bruselas no tiene nada que ofrecer a los pueblos europeos más que un horizonte de recortes y pobreza para aumentar el voraz apetito de la industria militar y los fondos de cobertura. Pero hay un lado positivo, aunque únicamente es desde la perspectiva de los buitres europeos. La guerra contra Putin es la cobertura mediática perfecta para seguir desmantelando el estado de bienestar y privatizar todo, desde la infraestructura hasta los servicios sociales que es en definitiva el objetivo final buscado por las élites globalistas europeas. La UE, sin estrategia ni liderazgo, se dirige hacia su próximo naufragio, que nos arrastrará a todos consigo.”
8. Isaac Rosa: “Cualquiera pensaría que Rusia, que en tres años no ha sido capaz de vencer a Ucrania, y ha pagado un alto precio en vidas, material militar y daño económico, no tendría muchas ganas de nuevas aventuras. Pero hemos actualizado el viejo “Rusia es culpable”, y el espantajo de Putin será utilizado en adelante para justificarlo todo: ¿aumento del gasto militar? ¡Putin! ¿Recortar políticas públicas para gastar más en defensa? ¡Putin! ¿Recuperar la mili? ¡Putin! Cualquier cosa que nos propongan frente a Putin, colará. Incluido comprarle buena parte de esas armas… a Estados Unidos.
Se nos dirá además que Europa quiere la paz, y que solo está aplicando el viejo latinajo de “Si vis pacem para bellum” (si quieres la paz, prepárate para la guerra). Aparte de que la frasecita ha sido coartada histórica del militarismo, y hace tiempo que el pacifismo la sustituyó por “Si vis pacem para pacem”, muchos pensamos que “la guerra empieza en la fragua”, como tituló Sánchez Ferlosio uno de sus brillantes textos sobre la cuestión bélica. Decía Ferlosio que las armas “son un instrumento cuyo ejercicio se ha erigido en fin en sí mismo”, de modo que la propia existencia de las armas (y de la industria armamentística, que estos días se frota las manos) acaba siendo la primera causa de guerra.
Hoy que medio planeta se lanza al rearme, que también el “continente de paz” se apunte a la carrera armamentística es un desastre. Por mucho Putin que digan.”
9. Manu Pineda: “Ante este panorama, surge la pregunta: ¿de quién se tiene que defender hoy Europa? ¿Es correcto mantener esta espiral destructiva de tensiones con una Rusia que ha existido en su posición histórica, o es hora de establecer un marco de convivencia y entendimiento con nuestros vecinos al este? ¿Seguiremos buscando enemigos y provocando a Rusia y China, o comenzaremos a forjar alianzas basadas en la cooperación y el beneficio mutuo?
La OTAN ya no es percibida como un instrumento útil para garantizar la seguridad ni si quiera por los países más atlantistas. Si Estados Unidos ataca a Canadá o Groenlandia, ¿la OTAN apoyará a estos países o respaldará a EE. UU.? ¿Continuarán los países europeos invirtiendo en una OTAN liderada por unos Estados Unidos en constante conflicto con Europa y Canadá?
10. José Luis Martín Ramos: “En 1912-13 la dirección del SPD defendió aumentar el presupuesto militar siempre y cuando no afectara al gasto social del Estado; los dirigentes sindicales argumentaron que el desarrollo de la marina de guerra generaría puestos de trabajo y unos y otros aceptaron la prioridad de la defensa nacional ante la amenaza del ogro ruso. Las falacias, por no decir mentiras, se repiten. Aunque puedan edulcorarse diciendo que ese aumento del gasto militar no necesariamente se hará en armas sino en ciberseguridad y bla, bla, bla. Trampa porque, se gaste en lo que se gaste, pone en el foco lo militar y no otra cosa y porque no se enfrenta a la ola de militarismo que ya reclama volver al servicio militar, la censura contra el colaborador del “ enemigo”, etc. etc. y porque oculta el verdadero problema de Europa, su falta de coherencia política, su carencia de un proyecto político de una Europa en paz y defensora de la paz y la degradación de su democracia parlamentaria liberal en beneficio de la gobernanza oligárquica que tan bien representa doña Úrsula. Y para colmo esa militarización la impulsa en primera fila una cuadrilla de perdedores y fracasados políticos: Macron, Scholtz,…”.
11. Alberto López Girondo: “[…] en la semana las acciones de empresas bélicas se dispararon hasta dos dígitos en las bolsas europeas. Rheinmetall AG, el mayor fabricante de municiones de Europa, por caso, tuvo alzas de más del 10% y en lo que va del año, 85%. La sueca Saab también subió más del 10% y supera el 50% en 2025. En ese rubro, hay mercado para todos: al italiana Leonardo, que fabrica helicópteros y drones, no se quedó atrás. Tampoco Safran, fabricante de motores para la industria aeronáutica, recopila el chileno Maximiliano Villena en La Tercera. El ministerio de Defensa británico, a su vez, presentó nuevos contratos con las firmas BAE Systems, Babcock y Thales UK. Empresas del Reino Unido pasaron de exportar 35 millones de libras esterlinas entre 2012 y 2022, y desde la OME las ventas treparon hasta los 1.100 millones, consigna un artículo de Mark Curtis en Declassified UK, un portal donde se publica información desclasificada del gobierno británico. “Gran parte de la ayuda militar del Reino Unido a Ucrania —que asciende a 4.500 millones de libras este año— es en realidad un subsidio a las empresas de armas”, concluye Curtis.”
Notas
1) Sergi Raventós, “Pobreza en Cataluña, datos nefastos y políticas continuistas” https://www.sinpermiso.info/textos/pobreza-en-cataluna-datos-nefastos-y-politicas-continuistas
2)https://elpais.com/espana/catalunya/2025-03-09/empadronar-al-pobre.html
3) https://juantorreslopez.com/hay-esperanza-para-europa-pero-no-esta-en-las-armas/
Llamamiento a favor de la paz y el desarme
Iniciativa colectiva
Alarmados por las declaraciones de los dirigentes europeos que presentan gratuitamente a Rusia como una amenaza para toda Europa si no se la para en Ucrania, profesionales de varios países hemos redactado un manifiesto a favor de las soluciones diplomáticas, la paz y el desarme.
Si bien condenamos inequívocamente la invasión rusa de Ucrania, consideramos que esas declaraciones, incluidas las de la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, tienen como único objetivo “manufacturar el consenso” de los ciudadanos en torno al rearme.
El rearme acelerado que aquéllos proponen tendrá con seguridad un impacto muy negativo en los servicios públicos, supondrá una erosión del Estado de bienestar, aumentará la deuda pública y, sobre todo, en ausencia de acuerdos de control de armamentos, hará más probable la guerra con una potencia atómica como es Rusia.
Pedimos vuestra firma para decirles a nuestros gobernantes que trabajen por la paz y no a favor de las empresas de armamento.
RAZONES.
Alarmados por el lenguaje orwelliano que se ha instalado en el discurso político europeo según el cual la guerra es el camino hacia la paz mientras que la paz sólo lleva a más guerra, hacemos un llamamiento a la cordura.
Los ciudadanos europeos nos hemos convertido en pasajeros involuntarios de un tren conducido por unos gobernantes que, con el declarado pretexto de “hacer sangrar a Rusia”, pretenden ignorar las consecuencias desastrosas de un conflicto del que todos seremos perdedores.
En vísperas de anteriores conflictos europeos, por ejemplo la Primera Guerra Mundial, valientes intelectuales de las naciones enfrentadas, entre ellos Jean Jaurès, Romain Rolland, Bertha von Suttner o Bertrand Russell, se pronunciaron públicamente a favor de la paz, aunque por desgracia sus voces no fueran atendidas.
Hoy es atronador en todos los países el silencio de los intelectuales, que, al igual que el resto de los ciudadanos europeos, parecen preocupantemente anestesiados. Y cuando alguno decide hacer oír su voz a favor de la diplomacia es inmediatamente difamado como “marioneta de Putin”.
Condenamos inequívocamente, por contraria al derecho internacional, la invasión rusa de Ucrania, pero somos conscientes de que esa tragedia es consecuencia también de la persistencia de una organización militar, la OTAN, calificada de “defensiva” y que, lejos de disolverse al no tener ya enfrente al bloque comunista, siguió ampliándose y llevó su expansión hasta las fronteras mismas de Rusia frente a las promesas que se hicieron entonces al más alto nivel.
La guerra de Ucrania dura ya tres años; los muertos a ambos lados superan con mucho el millón, aunque ninguno de los países enfrentados dé cifras oficiales, y el número de heridos y tullidos para siempre es incontable.
A lo que hay que añadir los millones de ucranianos que huyeron del país, unos a Europa Occidental, otros a Rusia, todos ellos intentando escapar de la violencia. Un auténtico desastre humano.
Los Estados Unidos de Donald Trump, más preocupados por lo que perciben como el creciente poderío de China o la situación de Oriente Medio, parecen decididos a expoliar a Ucrania, y de paso también, a endeudar a Europa, debilitando aún más nuestro Estado social, en beneficio de la industria militar estadounidense.
Y nuestros gobiernos, negándose a aceptar que, dada la desigual relación de fuerzas, la guerra está perdida, arropan al presidente ucraniano prometiendo el envío de más armas y dinero para que el ejército ucraniano siga luchando hasta el último hombre o la última mujer.
Todo ello mientras proponen militarizar de modo acelerado nuestras naciones con el espantajo de un enfrentamiento con Rusia.
¿Han pensado nuestros gobernantes que, al no existir ya aquellos acuerdos de limitación de armamentos firmados durante la Guerra Fría y que tanto contribuyeron al mantenimiento de la paz, el enfrentamiento militar con una potencia nuclear como Rusia podría desembocar en una tercera, y esta vez definitiva, guerra mundial?
Hacemos un llamamiento a los políticos para que no olviden las dos grandes guerras que ensangrentaron el pasado siglo el continente y, abandonando la neolengua de George Orwell, trabajen activamente a favor de la diplomacia.
Es la única manera de evitar futuras masacres que arrasen naciones para el mero lucro de la poderosa industria armamentística.
Para firmar este escrito: https://www.openpetition.eu/petition/online/llamamiento-a-favor-de-la-paz-y-el-desarme#petition-main
https://rafaelpoch.com/2025/03/11/llamamiento-a-favor-de-la-paz-y-el-desarme/#more-2017