Sobre la guerra entre Rusia y la OTAN

Del presidente de Espai Marx, Joaquín Miras

Esta mañana [domingo 12 de mayo] estuve comentando esto que había escuchado y me han pedido que lo escriba.

Guerra entre Rusia y OTAN.

Guerra de desgaste, prolongada, industrial, no guerra corta de maniobra o sea de supremacía tecnológica que además a penas produce bajas entre los profesionales supremacistas, que no mueren y siguen siendo muy tecnificados porque son los que se formaron con tiempo [*1]

La guerras prolongadas la gana la gestión de recursos y la industria.

Recursos humanos: en la guerra de desgaste los soldados técnicos mueren y los ejércitos nivelan sus capacidades, nuevos soldados frente a nuevos soldados. Han caído los profesionales

Tecnología: mucho desgaste de armas en campañas largas y necesidad de reponer y de repararlas y que pueda ser hecho por gente con poca formación (los formados están «desgastados» muertos)

Debe haber fácil mantenimiento y fácil reparación de armas.

Fácil fabricación.

Fácil manejo porque es para novatos.

Avión F 35: cada hora de vuelo, 15 de mantenimiento. Cada 11 horas de vuelo, ¡un fallo crítico! Cada 4 o 6 horas de vuelo, debe ser retirado, si son 4 horas, son 60 desaparecidos de combate. No son aviones que se pueden mantener en operación de bombardeo constante como los sencillos SU 24 y Su 25

Abrams: por cada hora de acción, 8 horas de mantenimiento. Cada 4 horas de combate se los retira: 32 horas, y a talleres tecnificados porque se cambia toda la tornilería: el software, las gomas, las cadenas

F 16 fallo crítico cada 29 horas de vuelo y por cada hora de vuelo, 17 horas de mantenimiento.

[1*] Durante la 2ª GM, como ejemplo, los alemanes tuvieron ventaja en tanques porque los tanquistas de los sudetes eran los mismo que en Polonia y los mismos que en Francia y los mismos que en norte de África; se los extermina en Kursk, en un choque frontal de tanques, en un terreno elegido que impide la maniobra, se exterminan todos los tanques de ambos bandos. Alemania fabrica de nuevo más tanques, pero los tanquistas eran ya tan bisoños como los soviéticos.

Autor: admin

Profesor jubilado. Colaborador de El Viejo Topo y Papeles de relaciones ecosociales.

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