No estamos viendo el Fin de la Historia, sino una nueva alternativa al capitalismo financiero neoliberal centrado en EE.UU. y su economía basura de privatización, guerra de clases contra el trabajo y la idea de que el dinero y el crédito deberían privatizarse en manos de una clase financiera estrecha, dejar de ser un servicio público para financiar las necesidades económicas y el aumento del nivel de vida.
Michel Hudson (2023)
Mi vídeo del día: solidaridad.
En Lomas de la Pimienta, un barrio obrero de Zacatecas (México), los trabajadores se organizan para lanzar bolsas con comida a los migrantes latinoamericanos que viajan hacinados en los vagones de un tren de carga. La solidaridad es una de las principales armas de los pueblos. https://twitter.com/
Carlos Valmaseda (29/VIII/2023)
Buena reincorporación, buen septiembre, buen curso.
Sobre la primera cita: para llamarles la atención sobre un artículo de Michael Hudson, “Estados Unidos acaba de destruir un gran imperio”, publicado en TopoExpress [1], que quizás les pueda interesar.
Sobre la segunda: por el contenido (en sí y para sí) y como pequeño homenaje a un compañero imprescindible, Carlos Valmaseda, miembro del colectivo Espai Marx.
Tres observaciones previas:
1. Está en el barrio de mis padres, de mis tíos cenetistas, de mis amigos de infancia, en mi verdadero barrio (durante unos 30 años y en años posteriores), en Sant Martí de Provençals: ¡Viva la Biblioteca Pública barcelonesa Gabriel García Márquez! https://elpais.com/espana/catalunya/2023-08-21/la-mejor-biblioteca-publica-del-mundo-esta-en-barcelona-y-se-llama-garcia-marquez.html
2. Día histórico el 20 de agosto de 2023: Ecuador deja su petróleo bajo tierra e interpela al extractivismo: «Es una lección para los blanquitos europeos». Más del 58% de los ecuatorianos votaron a favor de frenar la extracción de petróleo de una las zonas (Yasuní) con más biodiversidad del planeta. https://www.lapoliticaonline.
3. ¿Han observado que la Federación Catalana de Fútbol o el Barça (¡més que un club!) hayan estado en la vanguardia de las posiciones críticas sobre las numerosas barbaridades vox-machistas-chulescas de Rubiales y palmeros afines? ¿Cómo interpretar su moderada moderación?
*
No son cosas que nunca nos hayamos dicho (Coixet, ¡qué gran película!). Son cosas que nos hemos dicho bastantes veces estas últimas semanas. Disculpen la insistencia, la repetición incluso:
1. El escándalo tantas veces comentado (que hay que seguir denunciado): votos necesarios para obtener un escaño según partido/coalición: UPN, 51.764; PNV: 55.156; EH Bildu: 55.560; Junts: 56.091; PP: 59.499; PSOE: 63.615; ERC: 66.126; Vox: 91.982; Sumar: 97.226; CC: 114.718; BNG: 152.327.
La ley electoral española no solo es preconstitucional, que lo es, sino, si me apuran, inconsistente y no constitucional. Pasos del correspondiente artículo de la C78: “El Congreso se compone de un mínimo de 300 y un máximo de 400 Diputados, elegidos por sufragio universal, libre, igual, directo y secreto, en los términos que establezca la ley… a) La ley distribuirá el número total de Diputados, asignando una representación mínima inicial a cada circunscripción y distribuyendo los demás en proporción a la población. b) La elección se verificará en cada circunscripción atendiendo a criterios de representación proporcional.” ¿Son consistentes a y b? ¿Voto igual? ¿Dónde queda la proporcionalidad resultados en mano?
2. El PSOE sigue siendo un fuerte partido refugio (o de defensa-protección, como prefieran). Lo fue también en 2004 cuando el engaño de Aznar sobre el 11M (Ciudadanos, como recuerdan, lo fue en Cataluña en 2017).
3. Sería un error subestimar (y mucho más despreciar) la movilización de sectores de la ciudadanía contrarios a un gobierno de la derecha extrema y la extrema derecha. Importante y meritoria.
4. Con la participación-colaboración, si fuera el caso (que está por ver), de Junts (y también del PNV), no tiene ningún sentido (solo publicitario) seguir hablando de gobierno, coalición o mayoría progresista. Junts ha posibilitado gobiernos de extrema derecha en municipios de Cataluña, y es derecha-derecha se vistan como se quieran vestir. El PP tiene toda la razón del mundo cuando señala que en asuntos económicos y en otros temas tienen plena coincidencia. ¿Recuerdan las políticas ultraliberales de Mas y Mas-Colell, vanguardia de todos los gobiernos neoliberales?
5. Muchos votantes de En Comú Podem-Sumar en Cataluña votaron a Sumar, no a En Comú Podem. Mi caso, por ejemplo, y el de amigos y familiares.
5.1. Nada apuntó En Comú Podem durante la campaña electoral sobre que, en caso necesario, iba a ceder dos de sus diputados a ERC para que la formación nacional-secesionista pudiese formar grupo parlamentario en el Congreso. Sin entrar en sus consideraciones xenófobas e hispanofóbicas de largo recorrido, recordemos que ERC es un partido que sigue defendiendo que el catalán debe ser el único idioma oficial de Cataluña y que el castellano debe ser relegado al ámbito familiar. Para ellos, su “lugar natural” en .Cat (y, si me apuran, en les Illes y en el País Valencià, tierras de conquista).
5.2. Por lo demás, ¿qué es eso de “ceder diputados”? ¿Una trampa parlamentaria para transgredir normas parlamentarias que afectan a la constitución de los propios grupos parlamentarios?
6. No hubo entusiasmo político-cultural en muchos votantes de Sumar. Se votó, si acaso, como la mejor (la “menos mala”) de las opciones posibles, ninguna de ellas satisfactoria. De nuevo: mi caso y el de amigos próximos.
7. Creo que el izquierdismo no me ciega si señalo que algunas políticas defendidas por Sumar (también los silencios y las políticas no defendidas durante la campaña) no son ni siquiera socialdemócratas. Encajan mejor en la etiqueta “liberalismo progresista”.
7.1. Me adelanto unos meses: en las próximas elecciones europeas: ¿cuál será el eurogrupo parlamentario europeo del que formaran parte los diputados elegidos en la lista de SUMAR? ¿El de los Verdes europeos, cogidos de la mano de los atlantistas Verdes alemanes por ejemplo?
7.2. No se entiende (o se entiende y la cosa clama al cielo) que la llamada izquierda de la izquierda apenas haya abierto la boca ante temas esenciales. Por ejemplo, sobre la guerra de Ucrania (¿se ha exigido la libertad de Pablo González?) o sobre la situación de Assange. ¿Cuántas críticas al atlantismo imperial de Biden? ¿Cuánto del OTANOTAN de siempre? ¿Cuántas críticas de calado a los grandes poderes españoles? Tampoco mucho sobre cambio climático, desigualdades (incrementadas), muertes obreras, armamentos nuclear. ¿No toca hablar de esos temas en campaña electoral? ¿Cuándo entonces?
8. Francina Armengol está donde está, en la presidencia del Congreso de diputados, no por su (loable y disidente) apoyo a la causa saharaui, sino por la (nacionalista) política lingüística de sus gobiernos. La consejería ha estado en manos de Més (una organización nacionalista que ahora forma parte de Sumar) y muchos trabajadores/as sin certificados de catalán (C1 o C2, no puedo precisar) han sufrido las consecuencias
9. Sin que se nos puedan escapar las razones de fondo en absoluto inocentes del nacional-secesionismo (su hispanofobia, su marcar paso nacional-estatal, su consideración de España como un Estado sin nación y sin lengua común, su liarla sea como sea,…), nada tenemos en contra (de hecho algunos nos hemos manifestado a favor desde hace muchos años) del uso del catalán, euskera y gallego en el Congreso de Diputados, aunque, ciertamente, el castellano sea lengua común de todos y permita entendernos sin dificultades. La inconsistencia, lo que clama al cielo, es que los que ahora plantean el tema como si fueran los primeros de la fila (por la diversidad-multinacionalidad de nuestra sociedad, dicen) no han tenido ni tienen vergüenza alguna en tildar de fascistoides, españoles de m., ñordos o botiflers (= traidores), y cosas aún peores, a aquellos diputados catalanes que han usado el castellano en sus intervenciones en el Parlamento de Cataluña, una Cataluña que, según parece, no es diversa sino una unidad monolingüe de destino en lo universal, sin olvidar, por otra parte, que la conselleria de Educación, siempre en manos nacionalistas (incluso en épocas tripartitas), nada ha hecho por la difusión y el conocimiento del gallego o del euskera entre nuestros jóvenes estudiantes de ESO, Ciclos o Bachilleratos [2] (¿Recuerdan el comentario de don Artur Mas, aplaudido por los suyos, sobre la extraña forma de hablar castellano de los niños andaluces y gallegos?).
La diversidad, multilingüismo y multinacionalidad de la que hablan vale para España (ellos no incluyen .Cat), pero no cuando hablan de Cataluña, a la que piensen y sienten en clave homogénea y uniforme. Y En Comú Podem, también Sumar (lo mismo Podemos), no conviene cegarse aunque nos duela, sigue ese discurso nacionalista casi al pie de la letra [3]… Sin el casi.
10. Los silbidos contra José Montilla (que por supuesto no es santo de mi devoción) del pasado lunes, 21 de agosto, en Sant Miquel de Cuixà (con destacada presencia de Jordi Pujol, ¿será juzgado?), muestran, según Jaume Reixach (coincido con él), el sustrato etnicista y xenófobo (también clasista) del nacionalismo catalán. Añade Reixach en su tuit algo que yo no hubiera añadido: “después de mil años de historia, Cataluña ha caido en un pozo del que solo saldrá si aceptamos 8 millones.”
11. No es que hayan descubierto una demostración más elegante del teorema de Pitágoras o del gran teorema de Fermat, pero parece razonable la alegría de la ciudadanía (con muchas más aristas feministas que patrióticas) por el triunfo de la selección femenina en el Mundial de Fútbol. La información en TV3 (y televisiones afines): la mínima posible y como si costara dar noticia de ello. En el fondo lo de siempre: la hispanofobia como gen esencial del medio (Si quieren ponerse de los nervios nerviosos, vean en redes secesionistas los comentarios sobre Aitana Bonmatí (la llaman Aitana Buenamañana) tras ganar el Mundial).
Vayamos a la paradoja a la que se hacía referencia en el título.
Notas
2) Uno de los filósofos, en su caso palentino-barcelonés, que más énfasis puso en este tema: Francisco Fernández Buey (1943-2012). ¿Cuándo una calle de Barcelona llevará su nombre?
3) Para una aproximación equilibrada (y magníficamente escrita) al tema: Bernat Castany Prado, “Congreso galáctico” https://elpais.com/opinion/2023-08-28/congreso-galactico.html (“Y por eso también creo que es bueno que en el Congreso de los Diputados puedan escucharse todas las lenguas, como si fuese el Congreso Galáctico de Star Wars. Y que también lo sería que se utilizasen, sin escándalo, en los parlamentos autonómicos. Y que aquellos que puedan hacerlo las alternasen, por el gusto de hacerlo, y también porque el objetivo no es formar un mosaico de teselas monolingües, sino una sociedad plural en la que cada individuo tenga la oportunidad de hablar y de amar cuantas lenguas quiera y pueda”); para una reflexión sesgadamente unilateral (ni una coma sobre .Cat): Gerardo Pisarello, “Plurilingüismo en el Congreso: ¡el momento es ahora, Sepharad!” https://ctxt.es/es/20230801/Firmas/43880/Gerardo-Pisarello-plurilinguismo-lenguas-idiomas-congreso.htm (reparen que firma como diputado de En Comú Podem, no como diputado de En Comú Podem-Sumar).
